Los relojes CASIO se codean sin remilgos en la BASELWORLD, la feria internacional de relojería por antonomasia que, cómo no, se celebra en Suiza cada año. A la ciudad de Basel acuden todos los fabricantes de relojes del mundo. Desde pequeños artesanos que diseñan y fabrican a mano los llamados “relojes muy complicados”, auténticas obras de arte que se venden por precios a menudo nunca revelados, producidos en muy reducido número cuando no se tratan de ejemplares únicos.
El orgulloso propietario de un estilográfica Montblanc Boheme Royal Pen – una joya, en el sentido más literal, con más de 1,000 diamantes engarzados – puede admirar la sencillez y economía de un aparentemente vulgar bolígrafo BIC, e incluso usarlo con orgullo en círculos selectos donde su estatus está fuera de toda duda y, libre de la presión por exhibir su poder adquisitivo, prefiere llamar la atención de sus amigos de una forma mucho más frugal.
Tipos de correas para G-Shock: materiales y adaptadores
Correas de caucho o resina para G-shock
Son las más habituales, esas correas de goma negra que todos hemos usado alguna vez. Sin embargo ya no estamos condenados a llevar nuestras muñecas de luto. La actual oferta existente es variada en texturas, colores, y acabados. ¿Buscas una correa nueva amarilla, naranja, o de camuflaje? Existe y puede ser tuya.
Correas NATO o Zulu: tela, el look militar para tu G-shock
Las oferta de correas de tela, aunque se pueden encontrar también en diferentes colores y acabados, está dominada por las ya icónicas correas de tela color caqui, aka verde guerra. Se las conoce también como “correas NATO” (OTAN) o “correas Zulu”. No es raro verlas en negro, a veces con dos rayas de otro color. Una de las ventajas de las correas de tela es que para muchos usuarios son más confortables al tacto. Hay quien es alérgico a otros materiales y sólo puede llevar correas de tela.
Acero inoxidable
No son muchos los G-Shock con correa de acero inoxidables, y quizás sean los más extravagantes y sólo para entendidos, por ejemplo, este GMW-B5000D-1ER de algo más de €400 no deja de ser una versión fortificada del clásico Casio digital de toda la vida.
Estas correas son muy difíciles de encontrar fuera de los canales de distribución oficiales, y no existe prácticamente oferta alternativa, por lo que las opciones de personalización disponibles para los usuarios de estos modelos son casi inexistentes ¿Un micro nicho a explotar?
Adaptadores y herramientas
En la práctica es posible adaptar correas “no G-Shock” a cualquier G-Shock mediante el uso de unos adaptadores universales muy fáciles de instalar.
¿Cómo cambiarle la correa a tu G-Shock?
Si no estás acostumbrado a cambiarle la correa a tu reloj y estás irremediablemente convencido de que te han parido con cinco pulgares en cada mano, entonces sólo puedo recomendarte que busques un relojero, o un amigo manitas, que te ayude.
Si nunca lo has hecho pero te gustan los retos, entonces cambiarle la correa a un G-Shock es un reto recomendable: es fácil y te sentirás como un auténtico McGyver.
En primer lugar necesitarás pocas pero adecuadas herramientas. Muchas correas se venden con el kit necesario para que tú mismo puedas hacer el cambio. Aquí puedes observar qué aspecto tienen las herramientas necesarias.
Existen multitud de vídeo tutoriales explicando cómo hacer este sencillo cambio, este vídeo por ejemplo explica en menos de 2 minutos cómo cambiar de una correa de resina a una de tela militar. ¡Dos lecciones en una!
G-Shock hoy: un éxito de ventas disponible en todos los precios imaginables
En 2017 Casio Computer Co., Ltd., celebró la marca de los 100 millones de relojes G-Shock vendidos. Casio comenzó a comercializar la gama G-Shock en 1983, tan sólo dos años después de que comenzará su desarrollo. Desde entonces las ventas de G-Shock han aumentado imparables, año tras año, hasta el día de hoy. Es uno de los pocos iconos ochenteros que ha logrado atravesar la barrera de tres décadas.
A día de hoy la gama G-Shock ha crecido hasta hacerse extensísima. Casi podría decirse que existe un G-Shock para cada personalidad, estilo, o situación. Si buscamos los extremos: una de las gamas más económicas de G-Shock es la mítica DW-5600, lanzada en 1987, los modelos de la línea 5600 son auténticos fósiles vivientes que pueden ser tuyos por apenas 100 euros! Pocos relojes nuevos, por no decir ninguno, aúnan tanta historia y calidad a tan bajo precio. Actualmente el DW-5600 que se vende como nuevo es una versión actualizada (DW-5600E) que cuenta con la tecnología Illuminator que retroilumina toda la esfera del reloj para lograr una lectura rápida e inequívoca de la hora en cualquier circunstancia. De hecho, el actual modelo DW-5600E no es sólamente una de las primeras y más exitosas líneas G-Shock de todos los tiempos, también cuenta con el honor de ser el primer Casio Illuminator de la historia. En la otra esquina del ring encontramos el G-Shock más caro – que haya producido nunca en serie – es el MRG-G1000RT-1A, a la venta por $9,000 (sí, has leído bien y no, no se nos ha ido la coma: NUEVE MIL DOLARES AMERRRRRICANOS!). Y si ya nos vamos a las ediciones limitadas ¿qué os parece este Casio G-D5000-9JR por $50,000?
Pero no hay que agobiarse. Como dice el refrán “sólo un hombre rico puede permitirse vestir como un hombre pobre”, así que si tienes pensado dejarte ver los muelles de Mónaco luce tu G-Shock DW-5600 con orgullo y confianza. Los millonarios que realmente entienden de relojes no dudaran en invitarte a la cubierta de su última adquisición para que te sumes a la fiesta.
Lo mismo ocurre con los relojes. Parecían condenados a la extinción y sin embargo… ¡se mueven! No sólo han resurgido de la mano, o la muñeca, de los smartwatches. El reloj convencional de toda la vida, ese que “sólo da la hora” vuelve a estar de moda. ¿Por qué? Por muchos motivos: porque ahora es vintage (véase el resurgir de los modelos más sencillos de Casio impulsado por la furiosa nostalgia ochentera), porque es una forma de destacar – ahora que nadie lleva reloj, o llevan uno inteligente, lo inusual, la nueva forma de expresar y diferenciar nuestra actitud y personalidad es lucir un reloj, y porque son prácticos. No se cuelgan, no hay que sacarlos del bolsillo, y casi no gastan pilas. Sólo hacen una cosa, pero la hacen a la perfección.
Si Galileo resucitara, lo primero que haría sería comprarse un Casio, y si es un GShock mejor. En nuestra web te mostramos algunos de los modelos más icónicos de esta marca para cuando te decidas entre ampliar tu colección con la compra de un G-Shock último modelo o cambiarle la correa a tu antiguo G-Shock. ¿Y por qué no? ¡Ambas cosas!